Entra en funcionamiento Privacy Shield
El nuevo acuerdo entre la E.U. y el EE.UU. Privacy Shield ya está en funcionamiento
Este nuevo acuerdo responde a la larga batalla legal contra Facebook que inició en 2011 el austríaco de Derecho Max Schrems, que motivó la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE por la que se anulaba la normativa anterior y se obligaba a ambas partes a negociar un nuevo acuerdo en el que la seguridad estuviera «mejor garantizada».
La aprobación oficial del acuerdo de protección de datos «Privacy Shield» por parte de la Comisión Europea, que ha sido la encargada de negociarlo con los EEUU, se produjo el pasado 12 de julio, lo que permitió su entrada en vigor inmediata tras la notificación a los Estados comunitarios y su publicación en los diarios oficiales de la UE y EEUU.
El acuerdo de protección de datos personales «Private Shield» entre la Unión Europea y Estados Unidos ya se encuentra operativo, ya que las compañías interesadas ya pueden inscribirse en el Departamento de Comercio estadounidense, que será el que velará por el cumplimiento de dicho acuerdo y además podrá imponer sanciones.
El Tribunal de Justicia de la UE anuló en octubre de 2015 el acuerdo conocido como «Puerto Seguro» para exigir un mejor nivel de protección, a raíz de esta prohibición la Unión Europea y los EEUU sellaron un nuevo pacto conocido como «Escudo de la Privacidad«.
Tal y como sucedía con el anterior acuerdo las compañías que quieren adherirse a este nuevo pacto están obligadas a respetar las nuevas reglas de protección de datos. La opción más sencilla y menos costosa es la inscripción en el Departamento de Comercio de EEUU. Establecer normas corporativas obligatorias o cláusulas contractuales es otra opción perfectamente válida.
«Privacy Shield» está destinado a proteger los derechos fundamentales de los europeos y garantiza la seguridad jurídica para las empresas, incluidas las europeas, que transfieren datos personales a EEUU», explicó en un comunicado la comisaria europea de Justicia, Vera Jourova.
Las nuevas normas reconocen el derecho de los ciudadanos a pedir información sobre la retención de sus datos o solicitar que se modifiquen los datos almacenados si son inexactos o han quedado desfasados.
Además ofrecen varios mecanismos de resolución de conflictos accesibles y asequibles, y en caso de que un caso no se resuelva por los medios previstos como último recurso un arbitraje se encargará de su resolución.
El Ejecutivo comunitario publicó hoy además una guía para que los ciudadanos conozcan cómo este nuevo marco garantiza sus derechos de protección de datos y qué pueden hacer si consideran que se ha producido un mal uso de esta información.